Me manda mi amigo Gerardo ,el de los Verdes, el enlace del blog de Greenpeace en el que, a manera de foto denuncia, la prestigiosa organización, retrata la contaminación lumínica y el despilfarro energético que suponen las 40.000 bombillas en cincuenta metros que contiene la portada de la feria de Córdoba.
Pasadas las navidades , recuerdo que ya contaba aquí que el alumbrado del consumo es una pasada en una ciudad gobernada por quienes se jactan de llevar en sus apellidos políticos los de izquierda unida, los verdes, convocatoria por Andalucía,(IU.LV-CA) .
Demasiados títulos para tan poca esencia, la verdad y además todos impostados. Pero, eso es otra historia. La que me lleva a escribir hoy, es que la capital cordobesa es una de las zonas más contaminadas de España. Ya lo señalaba hace unos años un informe oficial del Ministerio del Medio Ambiente, en el que la Córdoba aparecía junto a Madrid, Bilbao o Barcelona como una ciudad en la que la calidad del aire es muy mala.
En aquel entonces, los responsables de la cosa aquí tiraron balones fuera y no tomaron ninguna medida para rebajar esos índices que, amén de números y moléculas, representan enfermedades, señalando la Comisión Europea que cada año mueren en España 16 mil personas por la contaminación atmosférica.
Han pasado los meses y de nuevo aparece publicadas dos informaciones que vuelven alertar de que la contaminación sigue latente . La primera cuenta que la Unión Europea ha expedientado a varios países del continente, entre ellos el nuestro, por superar el límite de partículas en expansión, conocidas como PM10.
De nuevo, entre las zonas españolas donde aparecen esas “partículas”, figura la capital cordobesa. La noticia aquí, como otras que “ensucian” la imagen que la ciudad proyecta, ha pasado practicamente desapercibida. La nota dice que estas partículas , que son emitidas principalmente por las industrias , el tráfico y las calefacciones, pueden causar asma, problemas cardiovasculares, cáncer de pulmón y muertes prematuras. A esta información se añade otra , publicada recientemente , en la que también las abejas cordobesas han detectado niveles preocupantes en la calidad del aire, alcanzando valores altos de cromo y plomo en mayo y julio .
Este estudio fue presentado curiosamente por el concejal de medio ambiente cordobés, que sin embargo no aportó tampoco en esta ocasión ningún remedio para paliar o solucionar el problema. Antes al contrario, se detuvo en la curiosidad del experimento, que era pionero en España y otras consideraciones que tanto gustan a los periódicos , que buscan noticias amables, curiosas y sorprendentes para ilustrar sus páginas de amenidades.
foto1: autobus de la empresa municipal Aucorsa
foto 2:de ipereseo
foto 3: fábrica de cementos contaminando,de otra córdoba es posible
Demasiados títulos para tan poca esencia, la verdad y además todos impostados. Pero, eso es otra historia. La que me lleva a escribir hoy, es que la capital cordobesa es una de las zonas más contaminadas de España. Ya lo señalaba hace unos años un informe oficial del Ministerio del Medio Ambiente, en el que la Córdoba aparecía junto a Madrid, Bilbao o Barcelona como una ciudad en la que la calidad del aire es muy mala.
En aquel entonces, los responsables de la cosa aquí tiraron balones fuera y no tomaron ninguna medida para rebajar esos índices que, amén de números y moléculas, representan enfermedades, señalando la Comisión Europea que cada año mueren en España 16 mil personas por la contaminación atmosférica.
Han pasado los meses y de nuevo aparece publicadas dos informaciones que vuelven alertar de que la contaminación sigue latente . La primera cuenta que la Unión Europea ha expedientado a varios países del continente, entre ellos el nuestro, por superar el límite de partículas en expansión, conocidas como PM10.
De nuevo, entre las zonas españolas donde aparecen esas “partículas”, figura la capital cordobesa. La noticia aquí, como otras que “ensucian” la imagen que la ciudad proyecta, ha pasado practicamente desapercibida. La nota dice que estas partículas , que son emitidas principalmente por las industrias , el tráfico y las calefacciones, pueden causar asma, problemas cardiovasculares, cáncer de pulmón y muertes prematuras. A esta información se añade otra , publicada recientemente , en la que también las abejas cordobesas han detectado niveles preocupantes en la calidad del aire, alcanzando valores altos de cromo y plomo en mayo y julio .
Este estudio fue presentado curiosamente por el concejal de medio ambiente cordobés, que sin embargo no aportó tampoco en esta ocasión ningún remedio para paliar o solucionar el problema. Antes al contrario, se detuvo en la curiosidad del experimento, que era pionero en España y otras consideraciones que tanto gustan a los periódicos , que buscan noticias amables, curiosas y sorprendentes para ilustrar sus páginas de amenidades.
Así es que pese a estos peligrosos indicadores, los responsables de la salud pública se mantienen felices en sus cargos, convocando premios de fotos, viajando a las cumbres medioambientales, firmando protocolos e intenciones, dirigiendo discursos sobre la sostenibilidad, apuntándose al club de Kioto, a los Objetivos del Milenio y así con la más reprobable propaganda escénica y mediática ofrecen a la clientela el disfraz verde con el que tapan sus antiecológicas prácticas que favorecen el uso del coche privado frente al transporte público, que mantienen en el casco urbano industrias tan contaminantes como un fábrica de Cementos u otra que fabrica laminados de cobre y latón ,donde se crean nuevas zonas verdes y en la que van desapareciendo los árboles y los jardines, que son reemplazados por el granito y el cemento, que es más “moderno” y no hay que pagar jardineros que mantengan cuidados los parterres y las rosas, ahora que la única rosaleda, modesta y sola que había en la capital ha sido segada para en su solar levantar una biblioteca, como si no hubiera espacios para albergar los necesarios libros.
Tal vez las otras plazas las reserven para realizar aparcamientos o las mantengan en el barbecho para especular con ellas, para luego sufragar las políticas medioambientales de concurso y viaje. Lo peor, compañer@ es que nos estén jodiendo no sólo nuestras ilusiones sino nuestra salud, y a eso no tienen ningún derecho.foto1: autobus de la empresa municipal Aucorsa
foto 2:de ipereseo
foto 3: fábrica de cementos contaminando,de otra córdoba es posible